El hombre al servicio del hombre
JAVIER ALEJANDRO RAMOS - PERIODISTA
La creatividad del ser humano es infinita. A diario hay nuevos inventos destinados a cambiar la vida de millones de personas, en una sana competencia tecnológica que beneficia, en su mayoría, a la sociedad. Existen también aquellos aplicados a la destrucción y la guerra, aunque de ellos se sabe poco, pues su principal aliado es el secreto.
La creatividad del ser humano es infinita. A diario hay nuevos inventos destinados a cambiar la vida de millones de personas, en una sana competencia tecnológica que beneficia, en su mayoría, a la sociedad. Existen también aquellos aplicados a la destrucción y la guerra, aunque de ellos se sabe poco, pues su principal aliado es el secreto.
Hace poco, el ingenio peruano dio como resultado un asombroso aparato que condensa la humedad, la convierte en líquido y la procesa para dar agua potable, en un mecanismo dentro de paneles publicitarios en las carreteras desérticas de nuestra costa.
Desde que el hombre inventó las primeras herramientas y armas hace más de dos millones de años, para realizar tareas que no podía simplemente con sus manos, no ha parado de inventar.
En un listado preparado por el diario Belfast Telegraph sobre los inventos que han cambiado la historia se menciona por ejemplo el tambor (12,000 a. C.), la rueda (3,500 a. C.), el papel (101 a. C.), el arado (año 100), la silla de montar (año 200), el reloj (1092), la brújula (1190), el botón (1235), los anteojos (1451), la imprenta (1454), el cepillo de dientes (1498), el microscopio (1590), el termómetro (1592), el telescopio (1608), el condón (1640), la batería (1800), el cerillo (1826), la cámara (1826), el refrigerador (1834), la jeringa (1844), la llanta (1845), el foco (1848), el motor (1859), la bicicleta (1861),el teléfono (1876), el clip (1892) y la radio (1895).
También la aspiradora (1901), el brassiere (1913), el robot (1921), la televisión (1925), la cinta adhesiva (1937), el bolígrafo (1938), el microondas (1946), el teléfono celular (1947), la tarjeta de crédito (1950), la píldora anticonceptiva (1951), el microchip (1958), el láser (1960), el CD (1965), el cable de fibra óptica (1966), el internet (1969), la pantalla plana (1970), la calculadora de bolsillo (1971), la PC (1977), el código de barras (1973), el GPS (1978), el walkman (1979), la laptop (1982), los mensajes de texto (1992), el USB (1996), el Blackberry (1999), el IPod (2001), entre otros.
Hay muchísimos más que no están ahí. Para algunas personas es más importante el biberón, inventado en el siglo XVI, y para otras el mundo no sería el mismo sin el corrector líquido, creado en 1951, que evitó que se tiraran toneladas de papel y planos arquitectónicos.
Así, en el mundo se sigue inventando, y pronto se verán nanomisiles contra el cáncer; el dispositivo Argus II, que cura la ceguera, y un producto que traduce los ladridos de los perros a palabras en cuatro idiomas.